Yo también era una «Gigantona»

Hace un par de minutos , cuando conversaba con una amiga por télefono, tomé la desición de escribir esta nota (especialmente para Yara) porque hasta hace poco tiempo caí en cuenta lo mucho que me atormentaba ser «grande».

Cuando llegaron mis 11 años de edad todo fue , cómo decirlo? Terrible! Tenia 11 años, mi talla de zapatos era número 10 (40) era la más alta del salón en sexto grado y para colmo de males mis amigas eran mucho más bajitas que yo.

Fenómeno, pie grande, gigantona, miles de sobrenombres que ya no me acuerdo. Mi tormento mayor era encontrar unos zapatos de mi talla y en Cali era una tarea vergonzosa,  una niña de 11  en el calzado de mujeres, Dios! yo no quería crecer más!  es qué para qué quería crecer, me preguntaba.  Mientras mi mamá decía orgullosa : Se me creció la niña. Yo escuchaba el comentario : Es que duerme parada. La verdad aún no lo entendido pero me sigo ríendo por decencía cuando se asombran de por mi número 10 en zapatos.

Durante un tiempo me ponía una talla menos que la mía con tal de aparentar un pie más pequeño,  cuando veía una talla 38 o menos anhelaba que fuera la mía, pero la verdad ahora han pasado mucho años y he cumplido los 28 años de vida donde, a ver, a ver!! me encanta ser talla 10 en zapatos, donde ya no soy tan alta, mis amigas bajitas crecieron y en el mundo mi tamaño es un promedio, encuentro todo clase de modelos en mi talla y la verdad, quisiera ser más alta!!

No más alta, no más baja, La realidad es que este fue el tamaño con el que me mandaron al mundo y tengo que disfrutarlo, lo entendí después de  un largo tiempo y las oportunidades que me esta dando hoy en día la vida me dan motivos para sonreír , lo que algún día era el fin del mundo ahora solo es el comienzo de un mañana, el empezar de una nueva experiencia, y tengo que decir gracias mamá porque ella me explico que algún día iba a conocer un hombre con un pie tan grande como el mio y no me volvería dar pena andar a pie limpio.

Nota: No se rían mucho, me encanta andar descalza y ya no soy tan alta como un día lo creí, ahora soy una de esas chican que se empina y trata de saltar en los conciertos, soy feliz con mi tamaño, me coloco tacones cuando me da la gana y ya no me interesa si me dicen que duermo parada.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s