De las cosas que me ha tocado adaptarme es tener que hacer el paseo de lavar la ropa pues en mi casa no hay lavadora.

Eso de estar llevando la ropa de uno a otro lugar debe ser normal para algunos pero para mi no. Yo que crecí con el lavadero en el patio, lavando los cucos y el uniforme del colegio para luego colocarlo detras de la nevera, lo de la lavandería cada 8 días se me  hace nuevo y un poco cansón.

Las lavanderías aqui son un muy buen negocio – Eso creo yo pues nunca veo una sin algún cliente y  la mayoría trabajan 24 horas – la maquina pequeña cuesta $2,75 y la grande $ 3,50 además para usar la secadora debes poner monedas de 25 centavos y cada una te da 7 minutos de aire caliente, usualmente colocó unas 9 monedas y espero pacientemente, bueno eso quisiera yo, esperar pacientemente.

Los 30 minutos iniciales de la lavada de la ropa no se hacen tan largos, las redes sociales ayudan un poco y empiezas a leer cuanta frase despechada  y consejo para blanquear los dientes aparece en las publicaciones de tus amigos. Después de cambiar la ropa a la secadora empieza esa espera donde normalmente voy a correr, la lavanderia esta cerca a un parque y entonces en ese tiempo corro, corro y corro para ver si la ropa se seca más rápido y otras veces lo que hago es ir hacer alguna vuelta que he aplazado, postergado, dejado a un lado, «olvidado», esa vuelta que no quiero me obligo hacerla y entonces me siento como una mujer responsable por unos segundos.

De vuelta al laundry me doy cuenta que faltan algunos minutos para terminar de secar la ropa y empiezo a caminar lento, a contar las lineas del suelo, hacer frases con las iniciales de las placas , saludar los perros extraños y llego. Llego de nuevo a esa lavanderia donde muy poco se habla, usted no necesita pedirle cambio a nadie, hay una maquina que cambia sus billetes, usted no necesita preguntar nada , hay letreros por todas partes que responden sus dudas antes de que usted las tenga y…  la gente?

Pues venga yo le digo, depende. Depende de donde este y cuanto sabe ingles, yo vivo en un barrio donde aveces no sé si mis vecinos estan riendo o peleando, no entiendo los chistes y aveces siento que hablan como un costeño español solo que es ingles y aunque yo sonrío todo el tiempo buscando la oportunidad para practicar mi nuevo idioma machucado la mayoría del mundo esta en el celular seguramente viendo Modern Family cuando pueden reír en carne propia conmigo.( ay si claro)

La otra lavandería que visito regularmente para lavar las toallas del salon de belleza es donde veo más latinos, puedo ver que aprovechan el tiempo para llamar a sus familias y preguntan cómo esta pedro, pablito, el hijo del vecino y hasta cuando doblan la ropa siguen la lista de primos, hermanos, cuñadas…  debe ser que son muchos lo que dejaron en casa, entonces algunos sonrien, otros exclaman : esta embarazada! se va a casar! no puede ser ! luego prometen envíar algunos pesos y se marchan con el celular en la oreja escuchando todo lo que se estan perdiendo los unos de los otros y cargan las bolsas de la ropa con ambas manos.

Mientras tanto yo estoy «hablando » con la china que atiende el local, ella debe estar aterrada de la cantidad de veces que le digo thank you, pues yo quisiera decirle: Muchas gracias su mercé mi Dios le pague o mil gracias o ponerle conversa. Pero ella no sabe mucho ingles y yo tampoco, ella no sabe español y yo no sé chino entonces no veo otra que repetir thank you y sonreirle hasta que termina el momento donde ella me entrega la cajita del clorox color y se termina mi interaccion humana en las maquinas de la ropa.